Abogados expertos en despido Alta Dirección

Los contratos de altos directivos se caracterizan por no existir subordinación en la prestación de servicios (existe autonomía y plena responsabilidad). Además, el alto directivo ejerce poderes que corresponden a decisiones estratégicas para el conjunto de la empresa. Por ello, la extinción de este tipo de contratos están sujetos a un régimen especial.

Un contrato de alta dirección se puede extinguir por diversos motivos: bien por voluntad del propio directivo o bien por voluntad de la empresa. En ambos casos, para llevarlo a cabo se deben cumplir una serie de requisitos.

Si la empresa decide llevar a cambio un despido de alta dirección, hay que diferenciar varias situaciones: el desistimiento; el despido por causas graves y culpables; otras causas recogidas en el Estatuto de los Trabajadores como un despido objetivo, jubilación, etc.

Para argumentar que un despido de alta dirección es disciplinario, se debe demostrar que ha existido un incumplimiento grave y culpable del alto directivo. Para que la empresa pueda proceder de forma correcta debe: comunicar el despido por escrito, describiendo los hechos y la fecha de efectos del despido.

Si es el directivo el que decide extinguir su contrato con la empresa, debe dar un preaviso mínimo de tres meses y debe hacerlo por escrito. Además, puede tener derecho a indemnizaciones en caso de que argumente causas como: la modificación sustancial de las condiciones de trabajo; falta de pago o retraso continuo del salario; sucesión de la empresa o cambio importante en la titularidad de esta; cualquier incumplimiento grave por parte de la empresa que afecte a sus obligaciones.

En caso de que una empresa se encuentre en un proceso o tramitación de concurso, esta afectará a la extinción de contratos y despidos de alta dirección: 

1. Será la administración concursal la que pueda, por iniciativa propia o a instancia del deudor, extinguir o suspender los contratos de los altos directivos.

2. En este caso, un juez puede determinar la indemnización que corresponda al alto directivo, independientemente de lo pactado en el contrato, con el límite de la indemnización establecida en la legislación laboral para el despido colectivo.

3. El alto directivo puede suspender el contrato con preaviso de un mes, y seguirá conservando su derecho a la indemnización correspondiente.

Un alto directivo puede impugnar su despido en los 20 días hábiles siguientes a la fecha en la que se produce el efecto.