Cómo explicar derecho de forma sencilla y no morir en el intento es el reto de mucho profesionales en la actualidad. Hace años era algo impensable, pues parece que rebajar el nivel técnico del discurso puede malinterpretarse como pérdida de profesionalidad, sin embargo, ya no es así en la actualidad, incluso el abogado que es capaz de explicar a un nivel sencillo las cuestiones mas complejas le dotan de una habilidad especial. El debate se ha abierto tras un caso ocurrido un Texas, en el que se ha presentado una demanda en forma de cómic, algo sin duda inusual, pero permitido.
Emilio Gude, socio del área de litigación y arbitraje y abogado experto comenta: “Cuando empecé a trabajar, algo así era impensable. De hecho, en la ‘vieja escuela’ se retorcía el lenguaje casi a propósito, porque así parecía que se tenía más conocimiento. Hoy, quienes pleiteamos buscamos todo lo contrario: claridad”. Y añade en sus declaraciones a El Confidencial: “los equipos especializados en pleitear se están acostumbrando a trabajar con perfiles no jurídicos que les ayudan a la presentación de los asuntos. Se trata de explicar una cuestión técnica a alguien que no sabe de esa materia. Pero, atención, que no estamos inventando nada; es lo que lleva haciendo Ikea muchos años, logrando que personas que no tienen ni idea de bricolaje monten sus propios muebles en casa”.
El propio Gude explica cómo ha ganado casos de gran complejidad técnica gracias a la simplificación del lenguaje. Explicar los hechos de forma sencilla con material de apoyo como representaciones, esquemas o infografías e incluirlo en la documentación cree que hace más fácil el trabajo del juez a la hora de tener que interpretar y entender el caso expuesto.
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