La temporalidad en la construcción es una forma frecuente de contratación. La reforma laboral afecta también afecta a este sector y la reducción del contrato por obra obligaría a las empresas a recolocar a los trabajadores una vez terminadas los trabajos. En esta reforma se ha incluido un contrato indefinido adscrito a obra especial para el sector de la construcción.
Juan José Jiménez, manager en el área laboral, explica en La Información que "es una especie de híbrido entre los contratos de obra y los temporales, porque tiene causa de finalización [...] Especifica que el contrato de un trabajador de construcción adscrito a una obra no se puede extinguir cuando finalice, sino que la empresa tiene la obligación de darle una pequeña formación para reubicarle en otro proyecto".
En caso de que la recolocación no suceda, bien por parte de la empresa o bien por parte del trabajador, el contrato indefinido adscrito a obra quedaría extinguido. Por tanto, Jiménez opina que "a efectos estadísticos sí que va a reducir la temporalidad, pero al final es una solución que carece de sentido, porque si finaliza la obra no deja de ser un contrato temporal y las consecuencias son las mismas".
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