Todos y cada uno de los componentes de una empresa dejan, en algún momento, rastro a su paso en la relación con el cliente, pudiendo incidir de forma activa en la idea que éste vaya a tener sobre nuestra marca. Resulta por ello imprescindible, que los compromisos y la intención propios de nuestra empresa se hagan extensibles al comportamiento y la actitud de todos los intervinientes en el trato y la gestión con el cliente, ya que la marca que pretendemos abanderar, resultará intangible hasta que la dotemos nosotros de valor.
A medida que una empresa crece, deviene más complicado controlar ,por parte de ésta, el impacto emocional que su equipo crea a los clientes durante la relación comercial que a ellos les une; es necesario por tanto la corresponsabilidad comercial de todos, más allá incluso de las paredes de nuestras oficinas. Esta necesidad es mayor, si cabe, cuando se trata de un Despacho de Abogados, donde el cliente requiere sentirse acompañado y respaldado por la firma sobre la que deposita su confianza para que le asesore sobre sus bienes más preciados; su negocio, su patrimonio o situación personal.
De esta forma, la detección de la necesidad, puntual o permanente, de nuestro cliente, potencial o consolidado, traerá consigo nuevas relaciones comerciales y acuerdos que no deben ser exclusivamente responsabilidad del letrado o gestor de la encomienda. Una misma metodología comercial puede ser utilizada por cada uno de los miembros del despacho, que actuando bajo los mismos valores de la marca, fortalecerán la reputación de nuestra empresa y por ende, constituirán parte importante del área comercial del despacho. Un cuidado añadido en una primera atención telefónica; la escucha activa de quien contacta con nosotros; una elaboración de documentos oficiales, facturas o recibos, correctos y precisos o la accesibilidad y transparencia que emane de la decoración de nuestro despacho, son pequeños ejemplos de esta corresponsabilidad comercial.
En definitiva, técnicas de ventas y marketing pueden ser aplicadas de forma horizontal y por todos los integrantes del equipo, cualesquiera que sean sus categorías profesionales, dentro y fuera del entorno laboral, transformando la apreciación de necesidades en oportunidades, actuando en consonancia con la marca a la que representamos y de la que somos tangibilizadores.
Ana Mallén
Ceca Magán Abogados