¿Por qué son claves los seguros en el sector de la construcción?

¿Cuántas veces no hemos pasado por una acera debajo de un andamio y nos hemos preguntado “será seguro”? Como estos casos sería imposible enumerar todos los riesgos de siniestralidad que se pueden presentar en una obra de construcción, ni todos los factores que pueden afectar a dichos riesgos, me atrevo a enumerar algunos: la exposición a los agentes ambientales (viento, lluvia, etc.); la complejidad de las actividades; la variedad de las tareas; la gran cantidad de equipo y maquinaria pesada que se emplea; el elevado número de intervinientes en las obras y construcciones, contratistas, subcontratistas, proyectistas, etc., de forma que una inadecuada coordinación de los mismos o una inadecuada intervención de unos de ellos, agrava el riesgo de que se produzca un siniestro en cualquier reforma u obra, es por ellos que los seguros para el sector de la construcción son sin duda obligados para “su y nuestra” tranquilidad.

Sabemos que la accidentabilidad e imprevisibilidad del suceso está ahí y es inevitable, los accidentes ocurren y seguirán existiendo, pero por ello existen también los seguros, para prevenir y anticipar que dicho accidente se encuentre cubierto. 

Riesgos más habituales en la construcción

Los riesgos más habituales que pueden darse en el sector de la construcción y deben evaluarse en un seguro pueden dividirse en las siguientes categorías:

• Riesgos convencionales o normales, como incendios, explosiones, caída de rayo, robo, caída de aviones, choque de vehículo, etc.
• Riesgos catastróficos extraordinarios, como vientos, tempestades, inundaciones, terremotos, hundimientos, corrimientos de tierra, etc.
• Riesgos inherentes a la propia obra o construcción, que son los debidos a las actividades llevadas a cabo en la ejecución de las obras, como defectos de mano de obra, negligencia, errores de cálculo o diseño, o empleo de materiales defectuosos, etc.

¿Cuáles son los principales Seguros en la construcción y el sector?

De lo expuesto podemos deducir que, en el desarrollo de las obras de construcción, pueden suceder muchos eventos que den lugar a una pérdida económica para las personas o entidades implicadas en su diseño y ejecución, o un perjuicio para terceros, sucesos que determinan la necesidad de su aseguramiento y, por tanto, la obligación derivada del contrato de seguro para las compañías aseguradoras de hacer frente a indemnizaciones que pueden ser muy cuantiosas.

Entre los seguros para empresas de la construcción, queremos destacar los siguientes:

1. Seguro Todo Riesgo Construcción (TRC)

El seguro Todo Riesgo Construcción, es una póliza que cubre todos los daños que se puedan producir de manera accidental o imprevisible durante la ejecución de una obra civil, según lo establecido en los términos y condiciones. Este es un seguro muy flexible que se adapta a la perfección a cada tipo de obra y cliente de forma personalizada y es el seguro al que más frecuentemente acuden las constructoras para contratar (al menos las constructoras más reputadas de nuestro país).

2. Seguro Todo Riesgo Montaje (TRM)

Este seguro cubre los daños que puedan sufrir los bienes asegurados durante los trabajos de montaje de máquinas, aparatos y estructuras metálicas, siempre que dichos daños sucedan de forma accidental e imprevista. Por tanto, se asegura el montaje de cualquier equipo o proceso y/o fábrica.

Es muy parecido al Seguro Todo Riesgo Construcción; la diferencia fundamental es que en este Seguro TRM hay un periodo de pruebas de los bienes asegurados antes de que el propietario los reciba provisionalmente y comience el periodo de mantenimiento. ¿Cubre también la maquinaría que la constructora muchas veces alquila a terceros para llevar a cabo las obras? 

Efectivamente, existe la posibilidad de extender la garantía mediante la contratación de garantías adicionales, para amparar no sólo los daños sufridos por la propia obra sino también por los equipos o la maquinaria empleada para la construcción. 

Otra alternativa es garantizar pérdidas por daños materiales en la obra, como pueden ser: gastos de remoción y desescombro, daños a bienes preexistentes, gastos suplementarios por horas extraordinarias y por trabajos nocturnos o en días festivos, honorarios profesionales, etc. Otras garantías opcionales son la extensión de la cobertura durante el periodo de mantenimiento de la obra (periodo comprendido entre la recepción provisional y definitiva de la obra), o Pérdida de Beneficios Anticipada (ALOP).

3. Seguro de Garantía Decenal

Se trata de un seguro destinado a proteger a los propietarios, promotores y adquirentes de los edificios – o parte de ellos-, a partir de la fecha de recepción y por un periodo de 10 años desde la fecha de finalización de las obras, frente a los daños materiales que sufran debido a determinados vicios o defectos constructivos y que afecten de forma directa a la estabilidad del edificio. 

Desde la promulgación de la Ley 38/1999 de 5 de noviembre, de Ordenación de la Edificación (LOE), la garantía decenal es obligatoria para cualquier edificio de uso vivienda, cuya solicitud de licencia de obra de nueva planta o sobre preexistentes fuera posterior al 6 de mayo de 2000.  

Pero este seguro no cubre por ejemplo, los daños corporales, ni tampoco:

• Los desperfectos que se puedan generar por las reformas posteriores que realicen los propietarios de la vivienda.
• Los daños que cause el propietario o terceras personas a la vivienda.
• Los perjuicios debido al mal uso o el mantenimiento inadecuado del inmueble.
• El importe necesario para la conservación y el mantenimiento de la edificación desde la venta.
• Desperfectos causados por explosiones o incendios, a menos que se hayan producido por problemas en la ejecución inicial de la obra.
• Siniestros originados en partes de la vivienda sobre las que existan reservas; o sea, problemas que ya han sido detectados y hay que subsanar.

4. Seguro de Accidentes de Convenio para construcción

La mayoría de los convenios sectoriales de la construcción obligan a un seguro de accidentes que proteja a los trabajadores de estas empresas en caso de accidentes laborales que se produjeran en el desarrollo de la obra.

Al exigirlo el convenio, en caso de sufrir un accidente, la indemnización será un derecho para el trabajador de la empresa. Entonces, lo deberá abonar esta, si no ha externalizado ese riesgo a través del seguro.

Tengamos en cuenta que la siniestralidad en las obras de construcción es muy elevada, siendo el sector que más fallecidos ha registrado entre los meses de enero y octubre de 2022: 129 accidentes mortales, un 28% más que en 2021; los accidentes laborales más comunes están causados por caídas en altura, golpes por escombros y objetos, cortes y laceraciones, explosión o electrocución y también los accidentes por atrapamientos y de maquinaria o vehículos.

5. Seguro de Responsabilidad Civil

La actividad realizada por la empresa constructora implica riesgos, tanto en la propia obra, como a su entorno, pudiendo producir daños tanto a bienes como a personas, en ambos casos ajenos. Por tanto, el objeto del seguro es, en un sentido amplio, resarcir al asegurado de los daños y perjuicios que haya sufrido por una causa accidental y no querida, esto es, la compensación del perjuicio económico experimentado por un patrimonio a consecuencia de un siniestro, por una obligación de indemnizar por daños causados a terceros.

6. Seguro de Responsabilidad Civil Profesional

Como hemos avanzado, en una obra intervienen muchos profesionales: arquitectos, aparejadores, ingenieros, constructor, promotor… Todos ellos deben tener su responsabilidad civil cubierta para evitar problemas a futuro. 

Este seguro de obra protege frente a daños que se causen a terceros de una forma involuntaria, por ejemplo:

• El arquitecto responderá de un error de diseño.
• El constructor, si durante la obra causa daños, por ejemplo, a un miembro de otra contrata, deberá responder.
• El promotor, si en la obra se causan daños a terceros, también es responsable.

Estas figuras en ocasiones “se mezclan”, al actuar de forma coordinada. Por ejemplo, el promotor subcontrata la construcción, por lo que debe responder de los daños que cause el constructor frente a sus clientes, los compradores. Una forma de protegerse puede ser incluyéndose como «asegurado adicional» en la póliza del constructor. 

7. Seguro de Afianzamiento de Cantidades

El seguro de afianzamiento de cantidades es una alternativa al aval bancario. El promotor es quien está obligado a contratar este seguro. Garantiza al comprador de una vivienda la devolución de las cantidades entregadas a cuenta al promotor, si la construcción no llega a iniciarse o la vivienda no se entrega en el plazo de tiempo previsto.

Como vemos, las opciones son muchas y contratar los oportunos seguros de construcción no solo es fundamental para cumplir con los requerimientos de la ley, sino que también es el camino más idóneo para poder afrontar las consecuencias derivadas de los siniestros que puedan producirse durante el desarrollo de las obras y construcciones protegiendo la inversión y añadiendo garantías frente a reclamaciones de terceros. 

De los siniestros más habituales en las obras de construcción son los incendios, y entre ellos, los más típicos son los causados por equipos de soldadura y de origen eléctrico, así como los causados por acumulación de material inflamable, por ejemplo, el causado por auto inflamación de trapos impregnados de aceite de linaza utilizados por los operarios en las tareas de abrillantamiento y pulido de la tarima de una edificación en construcción, o el que se originó en una bolsa big-bag en la que una empresa de automoción almacenaba residuos del proceso productivo como trapos, guantes y papeles impregnados con aceites o grasas.

Afortunadamente, hoy es posible encontrar en el mercado productos cada vez más competitivos para proteger las obras frente a todas estas situaciones accidentales e imprevisibles que pueden producirse durante el desarrollo de una obra, siendo más importante aún contar con un asesoramiento profesional especializado a la hora de contratar estos seguros para empresas de la construcción o comunicar y tramitar un siniestro de esta especial categoría.

En CECA MAGÁN Abogados contamos con un equipo de expertos en el ámbito del Derecho del seguro que pueden ayudarte a resolver cualquier cuestión en esta materia para su empresa de construcción. Contacte con ellos aquí.

Equipo sector seguros